Esta semana nos llegaba una noticia preocupante de la DPH, aunque tenemos que admitir que no nos pilla de sorpresa. El Diario de Huesca recogía esta noticia:
La Audiencia Provincial admite a trámite una querella penal por presunta prevaricación contra Miguel Gracia, presidente de la DPH https://www.eldiariodehuesca.com/actualidad/audiencia-admite-tramite-querella-penal-por-prevaricacion-contra-miguel-gracia-presidente-dph_9562_102.html
Y no, no hemos sido nosotros. A pesar de que las bases del proceso de estabilización de 17 plazas de administrativo estaban hechas a medida como un guante de las personas que las ocupaban, como denunciamos en este post, decidimos ir por la vía contencioso-administrativa y no la penal. Por cierto, la vista oral del juicio se volvió a posponer (ya por segunda vez) por las huelgas del personal de la Administración de Justicia. Pero seguiremos trabajando por garantizar un proceso en condiciones reales de igualdad, mérito y capacidad.
En cualquier caso, la noticia de esta semana no tiene desperdicio, y es que uno de los sindicatos de la Corporación (CSIF) presentó contra el Presidente y el Secretario de la Corporación porque una funcionaria interina habría sido -presuntamente- beneficiada de la asignación de un puesto y plaza “a dedo”. La interina estaba en una plaza, y -presuntamente- sin mediar concurrencia competitiva alguna se le asignó a otra diferente, porque patatas.
No tenemos la querella para poder conocer con detalle lo expuesto, pero el asunto fue dictaminado por el Consejo Consultivo de Aragón porque inicialmente se tramitó como una revisión de oficio del 106 LPAC, y ese informe es público. Se puede descargar aquí: https://gd.aragon.es/cgi-bin/DICO/BRSCGI?CMD=VEROBJ&MLKOB=1208818520505, y en las conclusiones se ve la repulsa que hace el Consejo Consultivo de este asunto, que ahora pasa a vía penal.
Desde el máximo respeto a la presunción de inocencia, y sin tener ni idea -sinceramente- de en qué partido milita el actual presidente de la DPH, no sorprende que después del escándalo de estas 17 plazas hechas como un guante a medida se vayan destapando más escándalos de -presunta- corrupción en materia de función pública.
Tic tac. El cortijo se viene abajo.
Mis respetos a ese sindicalismo que no persigue privilegios sino el respeto a los principios de igualdad, mérito y capacidad.